Ortopedia_Oncologica_México

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Dr Ernesto Delgado Cedillo

martes, 31 de diciembre de 2013

Bone Metastases – Lytic versus Blastic


http://radiologypics.com/2013/02/10/bone-metastases/

Bone Metastases – Lytic versus Blastic

History: 60 year old male with lung cancer.
Sagittal CT of the thorax in bone windows shows multiple sclerotic and lytic foci within the thoracic spine vertebral bodies (arrows).
Bone metastases: Sagittal CT of the thorax in bone windows shows multiple sclerotic and lytic foci within the thoracic spine vertebral bodies (arrows).
This patient had metastatic lung cancer to the bones. Bone metastases are classified as either blastic or lytic:
Lytic bone metastases occur in the following cancers: renal, lung, breast, thyroid, melanoma, chordoma,paraganglioma, GI tract, urothelial, ovarian, melanoma, chordoma, and paraganglioma.
Blastic bone metastases occur in the following cancers: prostate, breast, carcinoid, lung, GI, bladder,nasopharynx, and pancreas.
As you can see in the image above, lung cancer can produce both blastic and lytic metastases.

jueves, 26 de diciembre de 2013

Gammagrafía. ¿Qué es y cómo funciona?

Subido el 28/11/2013
Visita http://www.fisioterapia-online.com - Todo sobre fisioterapia.

En medicina, la gammagrafía es una prueba de diagnóstico que utiliza la inyección de sustancias marcadas con un isótopo radioactivo que van a tener mayor o menor afinidad para fijarse o quedarse retenidas en un cierto tipo de estructuras según la sustancia que se haya introducido. La emisión radiactiva de este isótopo es captada por un aparato detector llamado gammacámara.
La información captada por la gammacámara, será procesada informáticamente para dar lugar a una imagen tridimensional en la que podremos ver las zonas donde se ha retenido mayor capacidad de la sustancia radiactiva y las zonas donde ha sido menor ya que como hemos dicho antes, cada sustancia va a tener una preferencia por fijarse en unos tejidos u otros o por llegar a zonas con mayor irrigación sanguínea como puedes ser zonas tumorales o zonas inflamatorias.
La prueba comienza como hemos dicho con la inyección de una sustancia que va a tener una mayor o menor predilección por distribuirse en un tipo u otro de tejidos. Esta sustancia ha sido marcada o unida artificialmente por una sustancia radiactiva que va a tener una emisión de radiación que aunque muy sutil será suficiente para ser recibida por el receptor.
Las imágenes obtenidas en esta prueba van ser de bastante baja resolución dada la mínima cantidad de sustancia radiactiva inyectada en el organismo pero van a ser en muchos casos de una gran utilidad porque nos van a permitir observar el funcionamiento de ciertos tejidos o estructuras al ver como está distribuyéndose la circulación sanguínea en el organismo.

Escintigrafía es un método de imagen de los acontecimientos nucleares provocadas por colisiones o cargados interacciones actuales entre las partículas nucleares o radiación ionizante y átomos que dan lugar a un breve pulso , localizada de radiación electromagnética, por lo general en el rango de luz visible ( Cherenkov radiación). Este pulso ( centelleo ) generalmente se detecta y amplifica mediante un fotomultiplicador o cargada elementos Coupled Device ( centelleadores ) , y su forma de onda eléctrica resultante es procesada por los ordenadores para proporcionar imágenes en dos y tres dimensiones de un sujeto o región de interés .


Gammagrafía. ¿Qué es y cómo funciona?
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martes, 24 de diciembre de 2013

Síndrome del Miembro Fantasma

http://blog.diagnostrum.com/2013/12/24/sindrome-del-miembro-fantasma/#!


Síndrome del Miembro Fantasma

Posted by  on dic 24, 2013 
Síndrome del Miembro Fantasma
Se denomina Síndrome del miembro fantasma al cuadro de sensaciones, dolor, picor, disestesias, sensación térmica, que sienten algunas personas en un miembro amputado, que persiste pese a no tenerlo.
Es un cuadro complejo que refieren casi dos tercios de las personas amputadas. El dolor es intenso y la sensación se hace tan insoportable que muchos de los pacientes piensen en el suicidio ante la terrible experiencia.
Su fisiopatología se basa en la persistencia de áreas cerebrales dedicadas a ese miembro que no reciben la respuesta del miembro y generan una descarga espontánea que contamina otras percepciones y se cronifica. Es decir, la patología del miembro fantasma no radica en los nervios periféricos del miembro afectado, sino en su proyección cortical.
De ahí que las medidas periféricas sobre nervios o muñones no generen la eficacia deseada (mucho menos los tratamientos quirúrgicos neurolíticos usados en el pasado). El problema depende de la plasticidad neuronal y la solución debe plantearse en esos términos.
Aunque el concepto de fantasmas sensoriales ha sido atribuido a Ambroise Paré en el siglo XVI, fue un médico norteamericano llamado Silas Weir Mitchel quien realizó la primera descripción científica rigurosa.
Weir Mitchell ejercía la medicina en el Hospital Lane, en Filadelfia, y se le considera el fundador de la Neurología americana, con más de ciento cincuenta publicaciones, muchas de ellas basadas en lo que vio en los soldados heridos de la Guerra Civil norteamericana.
Después de la batalla de Gettysburg, muchos excombatientes fueron llevados a Mitchell para su tratamiento. Aquel hospital de Filadelfia recibió tantos amputados, que los soldados le llamaban coloquialmente “Hospital del Muñón”.
Las descripciones de los pacientes tras las amputaciones no eran nuevas, sin embargo, Mitchell anotó que, de 90 amputados que había tratado, 86 habían desarrollado“fantasmas sensoriales” tras la amputación de un miembro. Describió múltiples variantes de las sensaciones complejas de los pacientes, asociadas a dolor y otras solo de percepción anómala, pero continua de la presencia del miembro, encogido, caliente, incómodo.
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Mitchell describía: “Solo un 5% de los hombres que sufrieron una amputación nunca tuvieron la sensación de que esa parte de su cuerpo estaba todavía presente. Del resto, hubo unos pocos que al cierto tiempo llegaron a olvidar el miembro perdido, mientras que el resto mantenía una sensación de su existencia que era más vívida, definida e intrusiva que la de su miembro adjunto realmente vivo”.
El interés de Mitchell por los amputados quizá dependiera de su relación con otro testigo de la guerra. Se llamaba Walt Whitman. En el invierno de 1862, en el momento más sangriento de la Guerra, Whitman viajó a Virginia en busca de su  hermano, que había sido herido en la batalla de Fredericksburg.  Pasó tres años colaborando en la asistencia de los heridos, cosiendo heridas, alimentándoles  y consolándoles o acompañándoles con la lectura de sus poesías.
Whitman comentaba cómo algunos soldados hablaban de los fantasmas de su propia carne que les perseguían  volviendo de la muerte para atormentarles. Weir Mitchell y Whitman se conocieron, entablaron amistad y mantuvieron relación durante casi toda la vida. No podemos afirmar si esta relación tuvo que ver con la descripción de los cuadros de miembro fantasma, aunque en composiciones como  “Drume taps” se describe el horror de aquellos hechos.
Pese a todo, años antes, Herman Melville escribió su gran obra, Moby-DickAl capitán Ahab, le faltaba una pierna, que precisamente se había comido la ballena blanca.
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En el capítulo 108, Ahab llama al carpintero del barco para que le haga una nueva pierna ortopédica y describe que todavía siente su pierna amputada “invisibly and uninterpenetratingly”. Su pierna amputada  es como un “falsario, un maniquí”. Ahab le espeta“¡Mira, pon tu pierna viva aquí en el lugar donde estaba la mía!; así, ahora, hay solo una pierna clara para el ojo, pero hay dos para el alma”. Actualmente, se enseña a la gente a recondicionar el cerebro usando un juego de espejos.
Los pacientes ponen a un lado su miembro normal y en el espejo ven el reflejo del miembro existente  como si fuera el miembro perdido, como si hubiera vuelto, entonces les pide que piensen que ordenan un movimiento a su miembro desaparecido y que ejecuten lo mismo en su miembro sano.
Nuestra paciente, Amparo, tenía 56 años cuando sufrió la amputación del brazo derecho en un accidente de tráfico. Múltiples operaciones reconstructivas después, y tras ocho años de evolución, acudió a nuestra unidad del dolor. Ya había recibido tratamiento para el dolor y su muñón había sido revisado dos veces por los cirujanos. Comenzamos tratamiento con gabapentina y amitriptilina sin obtener resultado pese a usar dosis de hasta 1800 de gabapentina y 75 de amitriptilina.
Decidimos iniciar un ciclo de anestésicos locales intravenosos que condujo a un alivio notable a partir de la séptima sesión, con 7mg kilo de lidocaína, completamos el ciclo hasta diez sesiones y mantuvimos la gabapentina a 1800 al día.
Una reaparición de síntomas nos hizo introducir la oxicodona a dosis de 20 mg cada 12h. Tres semanas después, pasamos a 40 cada 12h controlándose el cuadro y manteniéndose sin dolor desde entonces hasta la fecha, tres años después. El dolor, y sobre todo la sensación, no han desaparecido del todo, pese a la terapia de condicionamiento sensorial con espejos y la oxicodona, pero el cuadro se hizo tolerable mejorando su calidad de vida y su autoestima.

domingo, 22 de diciembre de 2013

Dolor óseo por cáncer/Bone cancer pain


Una nueva emergencia en oncología: Metástasis óseas en cáncer de mama


A new emergency in oncology: Bone metastases in breast cancer patients (Review).
Ibrahim T, Mercatali L, Amadori D.
Osteoncology and Rare Tumors Center, IRCCS Istituto Scientifico Romagnolo per lo Studio e la Cura dei Tumori (IRST), Meldola I-47014, Italy.
Oncol Lett. 2013 Aug;6(2):306-310. Epub 2013 Jun 4.
Abstract
Breast cancer (BC) is the most common tumour in females and as a result, the management of such patients is a major public health issue. A high percentage of BC patients develop bone metastases (BMs), occasionally even several years following the initial diagnosis. BMs are responsible for high morbidity and a reduced quality of life with the onset of various clinical complications defined as skeletal-related events (SREs), including pathological fractures, spinal cord compression, hypercalcaemia, bone marrow infiltration and severe bone pain, requiring palliative radiotherapy. Such complications reduce functional independence and quality of life, decrease survival rates and increase healthcare costs. The current treatment for metastatic BC aims to achieve meaningful clinical responses, an improved quality of life, long-term remission, prolonged survival and in a small percentage of cases, a complete cure. The treatment of this malignancy has become progressively complex, including well-known antitumour agents or bone-targeted molecules aimed at preventing bone complications and improving patient quality of life and the treatment outcome of a multidisciplinary programme. The importance of a multi disciplinary approach in the management of BMs is also widely accepted. The major complication of BMs are SREs which are responsible for reducing prognoses and patient quality of life and are correlated with high rates of hospitalisation with the subsequent social and economic consequences. For these reasons, it is crucial to prevent where possible or to identify and treat SREs promptly in an attempt to mitigate the ever-increasing clinical and economic burden.
KEYWORDS: bone metastases, breast cancer, multidisciplinary approach, skeletal-related events
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3789111/pdf/ol-06-02-0306.pdf





Metástasis óseas dolorosas

Painful boney metastases.
Smith HS, Mohsin I.
Department of Anesthesiology, Albany Medical College, Albany, New York, USA.
Korean J Pain. 2013 Jul;26(3):223-41. doi: 10.3344/kjp.2013.26.3.223. Epub 2013 Jul 1.
Abstract
Boney metastasis may lead to terrible suffering from debilitating pain. The most likely malignancies that spread to bone are prostate, breast, and lung. Painful osseous metastases are typically associated with multiple episodes of breakthrough pain which may occur with activities of daily living, weight bearing, lifting, coughing, and sneezing. Almost half of these breakthrough pain episodes are rapid in onset and short in duration and 44% of episodes are unpredictable. Treatment strategies include: analgesic approaches with "triple opioid therapy", bisphosphonates, chemotherapeutic agents, hormonal therapy, interventional and surgical approaches, steroids, radiation (external beam radiation, radiopharmaceuticals), ablative techniques (radiofrequency ablation, cryoablation), and intrathecal analgesics.
KEYWORDS: boney metastases, breakthrough, cancer, pain, triple opioid therapy

http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3710936/pdf/kjpain-26-223.pdf 

 

Los posibles objetivos terapéuticos para el dolor óseo inducido por la metástasis del cáncer.
The potential therapeutic targets to bone pain induced by cancer metastasis.
Wu J, Wei Y, Shi J, Chen F, Huang G, Chen J, Xia J.
J Can Res Ther [serial online] 2013 [cited 2013 Dec 5];9:135-41.
Abstract
About 75-90% of patients with advanced metastatic cancer experience significant cancer pain. Bone cancer pain is one of the most common pains experienced by patients with advanced breast, prostate, or lung cancer. It is characterized by significant skeletal remodeling, fractures, pain, and anemia, all of which reduce the functional status, quality of life, and survival of the patient. Recent years have seen great progress toward alleviating bone pain with the identification of a range of chemicals as well as receptors modulating cancer pain progression. However, the complicated interactions among these factors and, sometimes, the contradicting effects of the same factor in different pathways make it difficult to spot individual effective targets. The sheer quantity of the chemicals involved and the limited understanding from animal models are the constraints in the development of effective therapies for cancer bone pain. In this review, key targets will be discussed along the pain transduction pathway, including peripheral pain sensation, spinal cord transduction pathway, and the central nervous system, to offer a logical and systematic study for the development of combined anti-bone pain treatments.
Keywords: Bone metastasis, nervous system, pain transduction pathway, therapeutic target


http://www.cancerjournal.net/downloadpdf.asp?issn=0973-1482;year=2013;volume=9;issue=7;spage=135;epage=141;aulast=Wu;type=2



Atentamente
Anestesiología y Medicina del Dolor
www.anestesia-dolor.org

domingo, 15 de diciembre de 2013

Afectan tumores de hueso a adolescentes y adultos jóvenes

http://www.rotativo.com.mx/vida/salud/210395-afectan-tumores-de-hueso-adolescentes-y-adultos-jovenes/


Afectan tumores de hueso a adolescentes y adultos jóvenes

Los principales tipos de cáncer óseo que se atienden en el nosocomio son en principio osteosarcoma y condrosarcoma.

Guadalajara, 14 Dic. (Notimex).- Los tumores de hueso afectan primordialmente a personas en plena etapa de crecimiento, es decir, niños y adolescentes, así como adultos jóvenes en edades productivas, señaló el especialista Juan Manuel Castro Cervantes.
El jefe del servicio de Oncocirugía del Hospital de Especialidades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, indicó que los principales tipos de cáncer óseo que se atienden en el nosocomio son en principio osteosarcoma y condrosarcoma, en los que aún la etiología es desconocida.
No obstante, dijo, se han sugerido causas como radiaciones previas o incluso antecedentes de golpes o traumatismos en la zona en donde se desarrolló el tumor maligno.
Explicó que mientras el osteosarcoma se desarrolla exclusivamente en huesos, el condrosarcoma también puede abarcar cartílagos, en ambos casos se presentan síntomas como dolor agudo y persistente y deformidad ósea del área afectada.
Castro Cervantes manifestó que los tumores óseos aparecen curiosamente en huesos largos, esto es, que se localizan en estructuras y etapas muy relacionadas con el crecimiento y desarrollo físico del individuo.
Aunque su frecuencia es baja a comparación con otros tipos de cáncer, constituyendo alrededor del uno por ciento de todas las enfermedades oncológicas, son tumores de alta malignidad y en términos generales son agresivos para el organismo y de rápida evolución, apuntó.
“Es importante la detección temprana, son agresivos cuando no se atienden a tiempo, por ejemplo, el condrosarcoma no responde a quimioterapias entonces su manejo es sólo quirúrgico”, destacó.
Reiteró que por tratarse de estructuras óseas, el cáncer en hueso genera inmovilidad en el paciente, además que eleva el riesgo a sufrir fallas orgánicas, al infiltrarse fácilmente en tejidos blandos, órganos vitales como los pulmones.
Insistió en la importancia de detectar oportunamente la problemática, dado que los pacientes con cáncer óseo sin tratamiento oportuno, pueden llegar a fallecer en poco tiempo, aproximadamente en un par de años, dada la rápida evolución de la problemática.
En contraparte, en el servicio de Oncología de este hospital, indicó Castro Cervantes, la expectativa de vida mejora en más del 80 por ciento de los pacientes que son sometidos a tratamiento, ya sea a través de quimioterapia o de procesos quirúrgicos.
Refirió que el año pasado, fueron sometidos a cirugía 25 pacientes con tumores malignos óseos en el servicio de Oncocirugía.
Por último, afirmó que para realizar el diagnóstico del cáncer de hueso es necesario realizar estudios como radiografía y resonancia magnética, ante síntomas como dolor y deformidades óseas en la adolescencia y juventud.

jueves, 12 de diciembre de 2013

Nonossifying Fibroma


http://www.learningradiology.com/notes/bonenotes/nonossifyingfibpage.htm

Nonossifying Fibroma

AKA: Nonosteogenic fibroma, fibroxanthoma, xanthogranuloma of bone

  • 30 to 40% children over two years have one or more lesions
  • Most common between 8-20 years of age
  • Usually occur in metaphysis of one (75%) or more (25%) of the tubular bones



  • Most often occur in lower extremities around knee
    • Fewer than 10% occur in upper extremities
  • Characteristics
    • Geographic
    • Lytic
    • Multilobulated
    • Metaphyseal
    • Usually intramedullary
    • Eccentric
    • Well-marginated
    • Sclerotic rim
    • Endosteal scalloping
  • Most lesions heal spontaneously by being replaced with normal bone
    • Migrate away from epiphysis
  • May undergo pathologic fracture or rarely cause rickets
    • Do not undergo malignant transformation

lunes, 9 de diciembre de 2013

TUMORES DE BROWN


DISPLASIA HEMIMELICA EPIFISARIA


jueves, 28 de noviembre de 2013

DR LINARES/ TCG EXPERIENCIA EN EL INR, México

DR LINARES/ TCG EXPERIENCIA EN EL INR/ dvd47 2
TUMORES ÓSEOS
XXVII JORNADA NACIONAL DE ORTOPEDIA
58°REUNIÓN ANUAL 2013
1° AL 5 DE MAYO ACAPULCO GRO, MÉXICO



domingo, 24 de noviembre de 2013

Synovial Osteochondromatosis of Subacromial Bursa


miércoles, 20 de noviembre de 2013

Sesión anatomopatológica Tumor Mixofibroso Lipoesclerosante

Publicado el 20/11/2013
Exposición a cargo de la Dra. Adriana Atencio Chan, médico adscrito al Servicio de Anatomía Patológica del Hospital de Ortopedia "Dr. Victorio de la Fuente Narváez" (antes Magdalena de las Salinas) del Instituto Mexicano del Seguro Social, con motivo de las pláticas de los días académicos del Servicio de Ortopedia Mixta.



domingo, 10 de noviembre de 2013

DISPLASIA OSTEOFIBROSA


jueves, 7 de noviembre de 2013

XXXII CONGRESO NACIONAL DE ORTOPEDIA Y TRAUMATOLOGÍA. 59° REUNIÓN ANUAL, MÉXICO, 2014


martes, 5 de noviembre de 2013

Radiología de lesiones pseudotumorales y tumores óseos benignos

http://www.tecnicosradiologia.com/2013/11/radiologia-de-lesiones-pseudotumorales.html?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed%3A+tecnicosradiologia%2FuuBL+%28Tecnicos+Radiologos%29&utm_content=Yahoo%21+Mail
MARTES, 5 DE NOVIEMBRE DE 2013

Radiología de lesiones pseudotumorales y tumores óseos benignos



Este texto completo es la transcripción editada y revisada de una conferencia dictada en el curso Lesiones Tumorales y Pseudotumorales del Sistema Musculoesquelético, organizado en Santiago por el Departamento de Ortopedia y Traumatología de la Universidad de Chile del 12 al 16 de mayo de 2003. Director: Dr. Miguel Sepulveda H
Los tumores óseos benignos se clasifican de la siguiente manera:
1.- Tumores formadores de hueso
osteoma
enostosis
osteoma osteoide
osteoblastoma
fibroma osificante2.- Tumores formadores de cartílago

condroma (encondroma)
osteocondroma
condroblastoma
fibroma condromixoide3.- Tumores de origen fibroso

fibroma desmoplástico
4.- Tumores de origen vascular
hemangioma
5.- Otros
lipoma intraóseo
tumor de células gigantes
6.- Seudotumores
quiste óseo simple
quiste óseo aneurismático
displasia fibrosa
defecto fibroso metafisiario



1.- Tumores formadores de hueso
Osteoma
Es un tumor benigno formado por hueso compacto en hueso membranoso, que se puede ver a cualquier edad, pero de preferencia en la cuarta y quinta décadas. Nace desde la cortical hacia la periferia y se localiza fundamentalmente en cráneo y senos paranasales, aunque también puede aparecer en el maxilar y, raramente, en los huesos tubulares.
Cuando hay lesiones múltiples, se debe descartar un síndrome de Gardner, que además presenta pólipos colónicos y tumores de partes blandas, como el desmoides.


En la Figura 1 se aprecia un osteoma que da una imagen esclerótica, de bordes mal definidos, que protruye desde la tabla externa del cráneo

Osteoma osteoide
Es una lesión formadora de hueso que se ve en personas jóvenes, entre los 7 y 25 años. Se ubica en la diáfisis de los huesos largos: extremo superior de fémur, húmero y tibia (70%), en los huesos de la mano (20%) y, con menos frecuencia, en el esqueleto axial.
Clásicamente, en la radiografía se aprecia una lesión cortical radiolúcida menor de 2 centímetros, que corresponde al nido, con esclerosis periférica. Ante lesiones dudosas, en las que no se visualiza bien el nido, el examen de elección es la TC (no la RM). En la cintigrafía se aprecia una lesión hipercaptante.
En la Figura 2 se aprecia una lesión cortical radiolúcida rodeada de un halo esclerótico, en relación con la metáfisis proximal del fémur, una de las ubicaciones características del osteoma osteoide.

Figura 2. Osteoma osteoide en metáfisis proximal del fémur.

Enostosis o islote de condensación
Son lesiones que frecuentemente se diagnostican como hallazgos. Se ven como nódulos escleróticos dentro de hueso esponjoso, de tamaño variable y contornos espiculados, de 2mm a 2cm de diámetro, que en la cintigrafía ósea no tienen actividad, aunque puede haber alguna en los de mayor tamaño.
Se pueden presentar en cualquier hueso, preferentemente en huesos largos (fémur), y a cualquier edad, pero con mayor frecuencia después de la pubertad. En la Figura 3 se observa una imagen esclerótica en medio del hueso esponjoso de la metáfisis tibial, correspondiente a un islote de condensación.

Figura 3. Islote de condensación en la metáfisis tibial.

La presencia de múltiples focos de enostosis se conoce como osteopoiquilia o displasia esclerosante.
Osteoblastoma
Es menos frecuente que el osteoma osteoide, su nido es mayor de 2 centímetros y su crecimiento es más rápido, por lo que la reacción esclerosante es menos llamativa. Se ve en menores de 30 años y se ubica, en 35% de los casos, en los huesos largos y, en 15%, en cráneo, mandíbula y maxilar.
Cuando se ubica en un hueso largo, 75% de las veces está en la diáfisis y da imágenes variables de lisis y esclerosis. Cuando se ubica en una vértebra, lo hace en los elementos posteriores, donde da imágenes líticas, expansivas, con calcificación parcial o extensa.
Las radiografías, en su mayoría, no son diagnósticas y se deben diferenciar del tumor de células gigantes, del quiste óseo aneurismático y del condrosarcoma.


2.- Tumores formadores de cartílago El segundo grupo de tumores benignos es el de los formadores de cartílago, que son tumores con matriz condroide y una periferia bien delimitada. Son los tumores óseos primarios más frecuentes.
Condroma
Es un tumor formador de cartílago maduro que se ubica en el interior del hueso; es de tamaño variable y no compromete partes blandas ni la cortical. Cuando se ubica en la zona central se denomina encondroma y cuando se ubica en la periferia se denomina condroma periostal o eucondroma.
Se ve de preferencia en la tercera y cuarta décadas de la vida. En 45 a 60% de los casos se ubica en la mano, de preferencia en la primera falange, y en 25% se ve en las metáfisis de los huesos tubulares largos como húmero, fémur y tibia.
En la radiografía se aprecia una lesión central, lobulada, que en la mitad de los casos presenta calcificación condroídea; además, puede presentar erosión endostal. En la Figura 4 se ve una lesión lítica, geográfica, lobulada, con pequeñas calcificaciones periféricas y con erosión endostal que compromete la primera falange.

Figura 4. Condroma ubicado en la primera falange.

Cuando se presenta en los huesos largos asociado a calcificación prominente, se debe hacer el diagnóstico diferencial con el infarto óseo.
La malignización ocurre en menos de 1% de los casos en condromas distales y solitarios; llega a 10% en las localizaciones proximales. La probabilidad de malignización aumenta aún más en ubicaciones axiales y cuando son múltiples.
Se debe sospechar malignidad ante la presencia de reacción perióstica, masa de partes blandas y destrucción cortical.
La encondromatosis múltiple es la presencia de múltiples encondromas; cuando afecta un hemicuerpo, se habla de enfermedad de Ollier (Figura 5). La malignización ocurre en 10% de estos casos, aproximadamente, y llega a 30% cuando son lesiones axiales.
Cuando la encondromatosis múltiple se asocia con hemangiomas cavernosos se habla de síndrome de Maffucci, en el que la malignización llega a 25%.

Figura 5. Encondromatosis múltiple (enfermedad de Ollier).

Condroblastoma
Es un tumor de ubicación epifisiaria, que habitualmente aparece en pacientes que todavía tienen cartílago de crecimiento. Se ve entre los 10 y los 25 años, aunque se debe dudar de este diagnóstico en los pacientes con fisis cerrada. Puede mostrar extensión hacia la metáfisis.
En los huesos largos se encuentra fundamentalmente cerca de la rodilla y, con menor frecuencia, en fémur proximal y húmero proximal.
En la radiología se ve una lesión epifisiaria geográfica, redondeada u ovalada, con una fina esclerosis periférica, menor de 4 cm, sin compromiso de partes blandas, que presenta matriz condroide calcificada en 50% de los casos y reacción perióstica en 30%.
En la Figura 6 se observa una lesión geográfica redondeada, ubicada en la epífisis proximal del fémur, correspondiente a un condroblastoma.

Figura 6. Condroblastoma en la epífisis proximal del fémur.

Osteocondroma
También llamado exostosis osteocartilaginosa, es el tumor óseo primario más frecuente. Se presenta en pacientes jóvenes: 75% de los casos son menores de 20 años.
Se ubica en la superficie del hueso y no interrumpe la cortical. Las localizaciones más frecuentes son: fémur (30%), tibia y húmero (20%), mano y pie (10%), pelvis (5%) y escápula (4%).
En la radiología se ven imágenes metafisiarias, las más frecuentes con un tallo alargado y fino que se aleja de la metáfisis y que da la impresión de un colgador de ropa, con continuidad entre la medular del hueso y la cortical afectada por el tumor.
En algunos tipos de osteocondroma se puede ver una capa periférica de cartílago calcificado que da la impresión de una coliflor, aunque de frente puede aparecer sólo como una lesión radiolúcida.
En la Figura 7 se muestra una imagen de osteocondroma que se presenta como una lesión exostótica, la que se aleja de la fisis y simula un colgador de ropa; se aprecia la continuidad entre la cortical y la medular del hueso afectado.

Figura 7. Osteocondroma femoral.

En la Figura 8 se muestra otra lesión, ubicada en la epífisis distal de la tibia; se aprecia la periferia del tumor, calcificada en forma irregular, que da la impresión de una coliflor.

Figura 8. Osteocondroma tibial distal.

Se debe sospechar malignidad en un osteocondroma de huesos planos (pelvis, escápula), cuando hay aumento de volumen y de partes blandas, cuando la capa de cartílago es mayor de 1,5 centímetros de espesor o es irregular, y cuando hay variación de la lesión en el tiempo.
Exostosis múltiple hereditaria (osteocondromatosis, aclasia)
Es una enfermedad hereditaria autosómica dominante, por lo que se deben averiguar los antecedentes familiares. Predomina en varones y es 10 veces más frecuente que la encondromatosis, la cual no es hereditaria.
Se presenta precozmente en la primera década de la vida y la malignización varía entre 10% y 20%. Evoluciona con mayor frecuencia a condrosarcoma y, ocasionalmente, a osteosarcoma.
Una presentación típica es la deformación de la muñeca en bayoneta, que se ve en 30% de los casos.
Fibroma condromixoide
Es el tumor menos frecuente de los formadores de cartílago. Se ve en personas jóvenes: en 60% de los casos se presenta en menores de 30 años. Es más frecuente en varones.
La ubicación predominante es en las metáfisis de las extremidades inferiores: 55% de los casos se ven en la rodilla; un tercio del total se presentan en la tibia, 25% se presentan en el pie. La malignización es rara.
En la radiología se aprecia una lesión radiolúcida, geográfica, bien delimitada, de contorno esclerótico, expansiva (como burbuja de jabón), excéntrica, casi siempre sin matriz calcificada. A veces presenta adelgazamiento endostal o rotura focal de la cortical normal.
Hemangioma
Es un tumor de origen vascular, que habitualmente se presenta en mayores de 40 años. Su localización más frecuente es en columna y cráneo (75% de los casos); también se ve en huesos largos. Cuando se presenta en la columna, lo hace en el cuerpo vertebral y, cuando aparece en el cráneo, compromete el hueso frontal.
En general, se ve como una lesión radiolúcida, geográfica y con escasa reacción perióstica. Según la ubicación, da aspectos más o menos típicos. En el cráneo se ve como una lesión redonda u oval, geográfica, sin bordes escleróticos, con aspecto en cepillo en la proyección tangencial, por la presencia de pequeñas trabéculas perpendiculares a la superficie del hueso.
En la vértebra, en cambio, se aprecia un entramado con trabéculas verticales más gruesas, como osteoporosis; en los huesos largos da un patrón expansivo que recuerda un panal de abejas. En la Figura 9 se observa un cuerpo vertebral con trabeculaciones verticales, que no producen crecimiento del hueso, correspondientes a un hemangioma.

Figura 9. Hemangioma vertebral.

Lipoma intraóseo
Es un tumor benigno, formado por tejido adiposo maduro, sin evidencia de malignidad. Se ve de preferencia en la metáfisis de huesos largos, como tibia y peroné, y en el calcáneo.
La edad de presentación es amplia, desde los 5 a los 70 años, pero se ve de preferencia entre la tercera y cuarta décadas.
En la radiología se ve como una imagen geográfica, lítica, que va expandiendo el hueso, y con esclerosis periférica. Puede presentar calcificación central; en ausencia de ésta, la lesión no se distingue del quiste óseo simple, pero en la RM es posible distinguir la naturaleza quística o lipoídea de su contenido.
Tumor de células gigantes (TCG)
Tiene mayor incidencia entre los 20 y los 40 años. Se ve con más frecuencia en fémur distal, tibia proximal, radio distal y húmero proximal; en el esqueleto axial, predomina en el sacro.
Es un tumor benigno, pero agresivo localmente, que nace en la metáfisis y avanza posteriormente hacia la región subarticular de la epífisis.
La radiografía es la piedra angular del diagnóstico. Se aprecia una lesión epifisiaria, lítica, excéntrica, expansiva, asimétrica, sin esclerosis, pero con bordes bien definidos, que adelgaza la cortical hasta destruirla. No presenta matriz calcificada, puede haber compromiso de partes blandas y puede contener niveles líquido-líquido.
En la Figura 10 se observa una imagen geográfica, lítica, sin bordes escleróticos, que compromete la cabeza del peroné y que corresponde a un TCG.

Figura 10. Tumor de células gigantes en cabeza del peroné.

Fibroma no osificante y defecto fibroso cortical metafisiario
Entre de las lesiones pseudotumorales, es la más frecuente y, más que una neoplasia, se la considera como un defecto de osificación.
Se hace la distinción entre defecto fibroso metafisiario cuando la lesión mide menos de dos centímetros en su diámetro mayor, y fibroma no osificante cuando es de mayor tamaño.
Es muy frecuente en las dos primeras décadas de la vida; se dice que 30% de los niños lo presentarían.
La localización más frecuente es en la metáfisis, de ahí su nombre, pero también puede comprometer la diáfisis de fémur y tibia, e incluso puede presentar localizaciones múltiples.
En la radiología se ve como una lesión excéntrica, ovoídea, que compromete una sola cortical, con bordes esclerosos y que puede ser lobulada. En la etapa de reparación se puede apreciar esclerosis frontal.
En la Figura 11 se puede ver una imagen excéntrica, geográfica, de bordes escleróticos y sin signos de agresividad, que compromete la metáfisis distal del radio, compatible con un defecto fibroso metafisiario.

Figura 11. Defecto fibroso metafisiario en radio distal.

Quiste óseo simple
También denominado quiste óseo solitario o unicameral, no corresponde a una neoplasia.
En 80% de los casos se ve entre los 3 y los 14 años de edad; en 75% se ubica en la metáfisis proximal de húmero y fémur; puede aparecer también en calcáneo, tibia, mano y otros huesos.
En la radiología se aprecia una lesión central, radiolúcida, geográfica, de diámetro longitudinal mayor que el transversal, que adelgaza la cortical e incluso puede insuflarla, y que contacta con el cartílago de crecimiento. No se aprecia matriz en su interior, puede haber lobulación y no hay reacción perióstica.
En la Figura 12 se aprecia un quiste óseo simple que se presenta como fractura en hueso patológico, una de las formas más frecuentes.

Figura 12. Fractura en hueso patológico secundaria a un quiste óseo simple.

Quiste óseo aneurismático
Hay quienes plantean que no se trata de una lesión primaria, sino secundaria a un tumor vascularizado con una fístula arteriovenosa, la que daría origen a las cavidades.
Se presenta principalmente en las tres primeras décadas de la vida (75% de los casos se ven antes de los 20 años) y es más frecuente en mujeres. En 80% se presenta en huesos tubulares largos y el resto en huesos planos y cortos, y en los elementos posteriores de las vértebras. Es de ubicación diafisiaria o metafisiaria, pero puede cruzar la fisis.
En la radiología se aprecia una lesión lítica, excéntrica, expansiva, con una fina periferia bien definida de periostio que semeja una cáscara de huevo, y múltiples septos internos. Son lesiones grandes, mayores de 5 centímetros (es frecuente que tengan 8 a 10 cm), que pueden tener un aspecto agresivo. En la TC y RM pueden aparecer niveles líquidos.
En la Figura 13 se aprecia una lesión lobulada y tabicada que insufla la rama isquiopubiana, correspondiente a un quiste óseo aneurismático.

Figura 13. Quiste óseo aneurismático en la rama isquiopubiana.

Displasia fibrosa
Es una anomalía del desarrollo esquelético, en la que el tejido óseo está reemplazado por tejido fibroso y trabéculas óseas inmaduras. Puede afectar un hueso o múltiples huesos, pero, en 80% de los casos, se presenta en forma monostótica.
Se ve principalmente entre los 8 y los 14 años de edad. Puede haber alteraciones endocrinológicas o cutáneas asociadas, como ocurre en el síndrome de McCune-Albright, que es la asociación de una displasia fibrosa poliostótica con manchas de color café con leche y pubertad precoz, con cierre precoz de los cartílagos de crecimiento y talla baja secundaria.
En la radiología se aprecia distintos tipos de compromiso óseo según la forma. La monostótica compromete costillas, huesos largos (Figura 14) y región craneofacial. Se manifiesta predominantemente como imágenes líticas en vidrio esmerilado, bien delimitadas, centrales, de bordes escleróticos, sin reacción perióstica, que pueden deformar el hueso, aunque en la base del cráneo se puede ver como imágenes escleróticas.

Figura 14. Displasia fibrosa monostótica.

La forma poliostótica altera totalmente la estructura ósea, produce deformidades y afecta toda la extremidad, tanto los huesos de los pies como los de la mano. En esta forma se ve la típica deformación del fémur proximal en “cayado de pastor”.

domingo, 20 de octubre de 2013

Estudia IPN propiedades antitumorales del chayote

http://yucatan.com.mx/imagen/ciencia/estudia-ipn-propiedades-antitumorales-del-chayote
Estudia IPN propiedades antitumorales del chayote

MÉXICO (Notimex).- El Instituto Politécnico Nacional estudia actualmente una variedad de chayote (Sechium edule), nativo de México, para evaluar sus propiedades antitumorales, dio a conocer Rafael Silva Torres, de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB).
En un comunicado, dijo que el alto índice de mortalidad por cánceres de mama, cervicouterino y de pulmón en el país son signos de alerta para buscar nuevas alternativas de tratamiento y prevención.
Estableció que de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 13.8 por ciento de mujeres con más de 20 años de edad fallecieron en México por cáncer de mama en el año 2011, mientras que 10.4 por ciento, de esta misma población murió por cáncer cervicouterino.
Asimismo, el 12.8 por ciento de los hombres mayores de 20 años de edad perdieron la vida por cáncer de bronquios o pulmón en ese mismo periodo.
Ante estos porcentajes, el investigador señaló que al estudiar esta variedad mexicana de chayote se encontró que contiene compuestos químicos con propiedades farmacológicas que sugieren actividad antitumoral, los cuales no están presentes en especies cultivadas en China, Estados Unidos, Rusia, Turquía, Rumania, Guatemala y Brasil.
Expuso que la especie que se estudia se cultiva en el cerro Los Montecillos, en el estado de Veracruz, la chayotera florece entre junio y julio, su siembra comienza en el mes de diciembre y la cosecha se realiza en mayo.
‘Las plantas que crecen en un país o en una localidad no tienen los mismos componentes que los de otros países, aunque sea la misma especie. Inclusive de un lugar geográfico a otro en México su contenido químico es completamente diferente, principalmente por los nutrientes y el pH del suelo. También influye el hecho de que sean variedades cultivadas o silvestres’, indicó.
Silva Torres indicó que se trata de un proyecto muy prometedor, debido a los hallazgos con que cuentan hasta el momento, y expresó que por la naturaleza de la investigación, se requieren estudios de caracterización biológica muy específicos.
Después de probar el efecto antitumoral de los compuestos, los investigadores planean llevarlo a la etapa clínica con el interés posterior de producir un medicamento, pues consideraron que es importante ampliar las alternativas para la prevención y tratamiento de los cánceres mencionados.
Silva Torres comentó que la importancia de identificar y concentrar los metabolitos secundarios con actividad antitumoral radica en que a partir de ello se generaría un producto farmacéutico y se podrá establecer la dosis clínica.
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jueves, 17 de octubre de 2013

Cáncer y no un indolentoma

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El peso de la palabra cáncer

Oncólogos de EE UU prefieren denominar de otra forma a los tumores leves para evitar tratamientos excesivos
En España son partidarios de usar el término pero rebajar el estigma asociado


EMILIO DE BENITO 17 OCT 2013 - 00:45 CET






La palabra "cáncer" debe explicarse en cada caso al paciente. / SAMUEL SÁNCHEZ



¿Qué le parece más grave, una leucemia, un linfoma o un cáncer? ¿Y una neoplasia? ¿La hiperplasia? ¿Lesión o proliferación celular? ¿Sarcoma, tumor, melanoma? ¿Un pólipo maligno? Las palabras las carga el diablo, y “cáncer”, pese a que ya más del 50% de los casos se curan, tiene una connotación tan negativa que oncólogos estadounidenses han llegado a plantearse si habría que acotarla. En un artículo publicado en julio en Journal of the American Medical Association (JAMA), un grupo de médicos del Instituto Nacional del Cáncer abrió el debate. “El uso de la palabra cáncer debería reservarse para describir las lesiones que tienen visos razonables de una progresión letal si no se trata”, afirmaron Laura Esserman (Universidad de California en San Francisco), Ian Thompson (Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas en San Antonio) y Brian Reid (Fred Hutchinson Cancer Research Center de Seattle). El artículo tenía un objetivo: denunciar el sobrediagnóstico y el sobretratamiento que se aplican, principalmente, en “mama, pulmón, próstata y tiroides”. “Y, a medida que se extiendan los programas de detección precoz se incorporarán más”, advertían los autores.


Hablar de sobrediagnóstico no es solo un problema económico por el exceso de recursos que se dedican a tumores que pueden ser benignos. Los autores señalan que, en esos casos, los pacientes optan por las terapias más agresivas, y eso cuando no caen en situaciones extremas, como dejar de trabajar, desesperarse o recurrir a curanderos.





Un artículo sugiere usar "indolentoma" para los casos menores y curables


Para confirmar esta opinión, otro artículo publicado en la misma revista a finales de agosto echaba más leña al fuego. En un ensayo, se tomaron 394 mujeres sanas y se las dividió en tres grupos. A todas se les dijo que imaginaran qué harían si tenían “carcinoma ductal [de mama] in situ”, y que este “solo en muy baja proporción podía derivar en un tumor maligno”. Al explicarles la enfermedad, la describieron de tres maneras: “cáncer de mama no invasivo”, “lesión en el pecho” y “células anormales”. Y luego les preguntaron qué tratamiento querían: cirugía, medicación o estar en observación. La conclusión fue clara: el 47% de las que escucharon que era un cáncer pidieron operarse, frente al 31% de las que les dijeron que eran células anormales. “Al excluir la palabra cáncer del diagnóstico más mujeres optaron por tratamientos menos invasivos”, concluyen los autores, dirigidos por Elissa M. Ozanne, de la Universidad de California en San Francisco.


El problema no se limita al carcinoma ductal in situ (que no es escaso, porque cada año se diagnostican unos 50.000 solo en Estados Unidos). También hay formas de cáncer de próstata candidatas. A todos ellos los oncólogos del estudio proponen llamarlos “indolentomas”, como una manera de reflejar su poca agresividad y la lentitud en que pueden evolucionar a formas peores (si lo hacen).





A un paciente con miedo el médico le "vende con facilidad una operación"


La propuesta incendió las redes médicas de EE UU. George Lundberg, que fue director de Medscape, la web sanitaria de más impacto en Estados Unidos (lo que es tanto como decir en el mundo) defendió la propuesta. “Decir cáncer, el emperador de todas las enfermedades, son palabras mayores. Hay que ser muy cuidadoso. Con ese diagnóstico, el patólogo está dando permiso a cualquier clínico para que trate a su paciente con lo que sea, con cualquier terapia que esté de moda, incluyendo que lo corte, lo bombardee con rayos o envenene al tumor y al paciente”. “Muchas lesiones que son llamadas cáncer no lo eran en absoluto según su comportamiento, y cada vez más pacientes lo padecen. Estas víctimas desafortunadas han sufrido unos enormes daños físicos y económicos sin ningún claro beneficio después de que se encontraran y se trataran sus ‘no cánceres”, concluye Lundberg. Para el médico, “incluso si la palabra cáncer se rebaja con expresiones como ‘in situ’, ‘temprano’, ‘precáncer’ y otras similares, el paciente quiere que se lo extirpen. Que un cirujano les venda una operación es realmente fácil”.


Este comentario tuvo varias respuestas en la web, como la de un médico que, sin identificarse, decía: “Entonces, ¿cómo llamo a una ‘lesión indolente de origen epitelial’ [uno de los nombres propuestos para una forma de cáncer de próstata] que produce una metástasis en un ganglio? Como patólogo me parece que la idea está llena de riesgos, y que puede perjudicar a los pacientes. Tiene un tono de ‘no te preocupes, sé feliz [la famosa canción Don’t worry, be happy]’, pero no representa la realidad para muchos pacientes”.



"No lo llames una larga y penosa enfermedad", dicen los afectados

Por una vez, el debate parece que no ha cruzado el Atlántico. O que ha muerto según ha llegado. El océano constituye una auténtica barrera. Aunque probablemente lo que separe no sea el agua. En EE UU, con predominio de la sanidad privada, los pacientes pueden verse tentados por su propio médico a elegir alternativas más caras y extremas. En España, el médico no tiene tantos intereses espurios, y el paciente tiene menos alternativas.


“Un cáncer es un cáncer, sea una enfermedad o solo un susto”, dice el presidente de la Sociedad Española de Oncología Médica, Juan Jesús Cruz. “Es el caso de los in situ, que no te van a matar. Pero es bueno saber que hay tumores que en un 99% de las veces no van a dar problemas. Otra cosa es cuando hay prelesiones y se les llama cáncer”, añade.


Cruz ha seguido el debate en Estados Unidos, y cree que, tras la discusión, hay otros aspectos positivos que se pueden sacar. “El problema cuando hablan de los cánceres de próstata, por ejemplo, no es tanto el nombre, sino el sobrediagnóstico. Lo que habría que preguntarse es si tiene sentido hacerle las pruebas a un hombre de 70 años que tiene cinco de esperanza de vida, cuando va a morir antes de que ese cáncer le haga nada. O hacerle una colonoscopia a una señora de noventa”.





Hay que explicar que hay casos que no van a empeorar, afirma un médico


Todo esto no obsta para que haya cosas que mejorar en la comunicación entre el médico y el enfermo, añade el oncólogo. “A lo mejor hay que informar poco a poco, no todo de golpe, igual que hay personas que no quieren saberlo y dicen que hables con su hijo”, indica. “Pero lo comuniques como lo comuniques, y aunque la célula nunca vaya a evolucionar en metástasis, como los tumores de piel de los viejos, anatomopatológicamente es un cáncer”, recalca. “También hay que tener cuidado con una persona cuando le dices que ha tenido un infarto, y a nadie se le ocurre cambiarle el nombre”.


Cruz coincide con los afectados: los enfermos o exenfermos. Begoña Barragán, presidenta del Grupo Español de Pacientes con Cáncer(Gepac), es tajante: “Somos los primeros que queremos llamar a las cosas por su nombre”, afirma. “Entrar en la política de eufemismos me parece absurdo”, recalca Emilio Iglesia, presidente de ColonEuropa España, que agrupa a las personas que tienen o han tenido un cáncer colorrectal. “Podrá haber un cáncer light. Si es muy leve en vez de un tumor maligno será malignito, pero es un cáncer”, dice.


De hecho, en España las asociaciones de pacientes tienen una batalla constante por quitar carga negativa a la palabra cáncer. “Pero sin engañar”, dice Barragán. “Por muy bueno que sea, un cáncer no se cura el 100%”. En algunos casos, precisamente el intento por hacer más suave la noticia es peor. “Un hombre con un linfoma quiso denunciarnos porque en una campaña decíamos que eso era un cáncer. A él le habían tranquilizado cambiando la palabra, y cuando supo lo que era, se llevó un disgusto enorme. Pero no era culpa nuestra: el engañado era él”, cuenta Barragán.





Ni el facultativo quiere informar de la dolencia, ni el paciente oírlo


Precisamente sus asociaciones llevan años propugnando que se usa la palabra tal cual. Campañas como No lo llames una larga y penosa enfermedad, llámalo cáncer han surgido de ellas. Otro de sus caballos de batalla es que en los medios no se asocie siempre la palabra a algo negativo. “Aunque la Real Academia lo acepte, expresiones como que ‘la corrupción es el cáncer de la política’ nos hacen mucho daño”, afirma Barragán.


Pero ese es el único caso peyorativo que los afectados rechazan. Cuando se trata de la enfermedad, les parece que la palabra debe emplearse. “Si la usamos tanto para casos que van bien como para los que van mal la estamos normalizando; si no, estamos castigando a los que lo tienen”, dice.


Esto no implica actuar sin control. “A lo mejor la información hay que darla en varias fases”, dice la presidenta de Gepac. “Lo que hay que hacer es explicarlo muy bien. Decir: ‘Es un cáncer, pero tiene muy buen pronóstico”.


Esto abre otro tema de debate. “A los médicos no se les enseña a transmitir malas noticias. Es un proceso perverso: ellos no quieren darlas, y el paciente no quiere escucharlas”, afirma Barragán. Por eso, “algunos se refugian en las palabrejas”. “Cuando hacen cursos de comunicación, les enseñan a hacer presentaciones y a hablar con la prensa, pero no hay ni una palabra de los pacientes”, critica Barragán. Patrizia Bressanello, psicóloga de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), también confirma que el lenguaje de algunos médicos no es el más claro. “A veces parece hecho para que no se entienda”.





A veces la carga negativa de la palabra ayuda en su seguimiento


Pese a esa falta de comunicación, dificultada porque a veces no hay ni un sitio adecuado para darla —“todavía muchas veces la información se da en un pasillo”, reprocha Barragán—, no se justifica que se cambien los nombres, opina Bressanello. “Si se trata de un cáncer, hay que llamarlo cáncer”, insiste. Y si el médico no puede dedicarle tiempo, “nosotros no tenemos ese problema en nuestro servicio”, afirma. “En oncología hay muchos avances, y hay que ir por ahí”, dice la psicóloga.


Bressanello cree que, además, en general esa carga que aún tiene la palabra cáncer tiene aspectos positivos. “Cierto grado de alerta no es malo. Puede hacer que aumente la adhesión a los tratamientos o el seguimiento de los controles o se esté más pendiente de la sintomatología”.


Respecto a las posibles acciones drásticas (ir al extranjero, empeñarse en operarse, caer en manos de un curandero) en que puede incurrir un afectado, “la solución sigue siendo la información”, dice la psicóloga. “La primera fuente del paciente tiene que ser el oncólogo, y es en lo que les insistimos. Claro que cuando la ciencia no llega a dar una solución, las personas buscan otra alternativa, pero siempre que la información que les demos sea veraz, son libres de hacer lo que quieran”, afirma Bressanello, quien opina que esa es la manera de respetar la voluntad de los pacientes. También el médico Juan Jesús Cruz se muestra comprensivo. “Pueden exagerar, irse fuera, y están en su derecho. Pero si lo que tenían era de poca importancia, tampoco la tendrá en el extranjero”.


Pese a su convicción, ni Barragán ni Cruz creen que el debate esté cerrado. “Lo de EE UU siempre nos llega”, dice la presidenta de Gepac. Hasta entonces, en España aplica el aforismo de Gertrude Stein: si una rosa es una rosa es una rosa, y no una flor más con espinas; un cáncer, con más o menos espinas, es un cáncer. Y no un indolentoma.

martes, 1 de octubre de 2013

Análisis biomecánico de un espaciador para neoplasias de rodilla en función del tamaño de la resección por medio de elementos finitos

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Análisis biomecánico de un espaciador para neoplasias de rodilla en función del tamaño de la resección por medio de elementos finitos

Víctor Araujo, Víctor Domínguez, José Martínez, Genaro Rico, Ernesto Delgado, Daniela Alcántara, Azucena Noriega, Paulina Carbajal

Resumen


Cuando se presentan tumores óseos en la rodilla, una opción terapéutica después de la resección en bloque de la neoplasia es la artrodesis, en la que el espacio eliminado quirúrgicamante es reemplazado por un espaciador, este se complementa con un clavo centromedular y cuatro pernos bloqueadores, todo el implante se manufactura en una aleación de titanio (Ti-6Al-4V). El espaciador tiene la capacidad de aumentar su longitud de 20 cm hasta los 30 cm y se utiliza como tratamiento definitivo. Su empleo reporta resultados satisfactorios a pesar de la artrodesis de la extremidad afectada. Sin embargo, presenta gran interés estudiar la influencia que tiene el tamaño de la resección del tumor en la integridad del implante. Para llevar a cabo este trabajo, se desarrolló un modelo de elementos finitos del conjunto fémur-implantetibia, con el software Ansys versión 11 (Ansys Inc. Canonsburg, PA, EUA). Las cargas utilizadas en la simulación corresponden a una fase de la marcha (apoyo medio). Se analizaron seis casos de estudio en los cuales se varió la longitud del espaciador: 20 cm, 22 cm, 24 cm, 26 cm, 28 cm y 30 cm. Los resultados indican que no existe riesgo de falla por fractura del implante al variar el tamaño del espaciador dentro de los rangos establecidos, ya que no se encontró diferencia significativa en los niveles de esfuerzo del implante. Sin embargo, los esfuerzos en los pernos tibiales se incrementan considerablemente a partir de los 24 cm de resección, lo que puede ocasionar el aflojamiento del implante.    

Texto completo: PDF 

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